sábado, 10 de noviembre de 2012

Hero y Leandro


Hero y Leandro

Este mito trata sobre dos jóvenes griegos. Hero era una sacerdotisa de Afrodita, se dedicaba por completo al culto de la diosa del amor y vivía junto a sus padres en una torre de Sestos, en el extremo de Helesponto. Leandro era un joven que habitaba al otro lado del estrecho, en Abidos.
Según se narra en algunas versiones, durante la celebración de un festival en honor a Adonis y Afrodita a la que acudió gente de todos los alrededores, Leandro vio a Hero y se quedó cautivado por su belleza. Hero aún sabiendo que su único deber era cumplir como sacerdotisa se dejó enamorar por Leandro. Esta relación no recibía el apoyo de los padres, que se negaron a que estos se casaran. Ante esta situación decidieron verse en secreto, así pues, Leandro atravesaba el estrecho a nado todas las noches dejándose guiar por la luz que emprendía una linterna que su amada situaba en la ventana de su habitación de la torre. Siendo su amor tan apasionado, Hero se dejó convencer por los argumentos de Leandro, en los que le decía que no se puede ser sacerdotisa de la diosa del amor sin conocer por completo el amor. De esta manera Hero decidió acostarse con él.
Su bonita historia de amor duró lo que la estación estival. Con la llegada del invierno Leandro no se dejó asustar por el mar violento, y seguía nadando todas las noches para ver a su amada. Pero en una trágica noche mientras nadaba hacía la otra orilla, la luz por la que se guiaba se apagó a causa del fuerte viento. Con esto Leandro perdió el rumbo y se ahogó en las frías aguas del mar. Viendo que su amado no llegaba, Hero, al día siguiente decidió bajar a la orilla del mar donde una ola arrastró a sus pies el cuerpo de su amado. Hero, desconsolada, lo tomó entre sus brazos y dejó que una ola se los llevara mar adentro donde ella se ahogó también.
Otras versiones relatan el final de otra manera. Según estas Hero viendo que Leandro no llegaba decidió tirarse al mar desde la torre en la que cada noche dejaba la luz para guiar a su amado.



Extracto de la fuente

Este mito es narrado por primera vez por Ovidio en sus Heroidas, poemas que relatan las cartas de amor escritas por las amadas para sus amados.
Aquí tenemos un fragmento de una carta de Hero dirigida a Leandro, en la que ella cuenta los pensamientos que le pasan por la cabeza mientras le espera, titulada: “La espera ociosa durante el día”.

Apartada yo de eso, aunque me abrase con menos fuerza
no me queda nada que hacer excepto enamorarme.
Lo que me queda hago y a ti, oh mi único placer,
te amo más incluso de lo que se me podría corresponder.
O cuchicheo con mi querida nodriza sobre ti
y me pregunto por el motivo que pueda retrasar tu
travesía,
o, mientras diviso el mar, increpo casi con tus mismas
palabras
a las aguas encrespadas por el viento fastidioso,
o, cuando el pesado oleaje ha remitido un poco en su
crueldad,
me quejo de que sin duda puedes, pero no quieres venir;
y mientras me quejo, brotan lágrimas de mis ojos
enamorados,
que mi anciana confidente seca con su pulgar
tembloroso.
Muchas veces miro si están en la orilla tus pasos,
como si la arena conservara las huellas estampadas
en ella;
y para preguntar por ti y escribirte, indago si alguien viene
de Abido o si va alguien a Abido.
¿A qué contarte las veces que estampo besos en tu ropa,
la que te quitas cuando te dispones a ir por las aguas
del Helesponto?

Influencia del mito

Literatura
Este mito ha servido como fuente de inspiración para otros autores como por ejemplo, Christopher Marlowe que escribió una versión de la historia más larga que acaba cuando Hero y Leandro se hacen amantes. George Chapman fue quien finalizó la obra de Marlowe.
Este mito también inspiró algunas obras teatrales, como por ejemplo la obra de Ben Jonson llamada Bartholomew Fair (La feria de San Bartolomé)
Garcilasode la Vega se inspiró en Leandro al escribir el Soneto XXIX.

Pintura
Es un grabado de 1883 cuyo autor es desconocido.
Es un cuadro de Keller.



Arquitectura
Se construyó La Torre de Leandro, que actualmente es conocida como La Torre de la Doncella, situada en el Bósforo, también conocido como el estrecho de Estambul (estrecho que separa Asia de Europa)






Hemos encontrado dos vídeos relacionados con el mito. El primero es una representación teatral hecha por alumnos, el segundo es una animación.


Opinión personal sobre el mito

Tras habernos informado sobre lo que trata el mito y tras haber leído fragmentos de algunas obras inspiradas en él, podemos decir que es una bonita historia de amor con trágico final. No es nada fuera de lo común, ya que en la literatura grecolatina se encuentran varios mitos de amor con trágicos finales.
En nuestra opinión Leandro es el amado ideal, ya que se sacrifica físicamente atravesando todo un estrecho solo para estar con su amada. En cambio Hero es algo egoísta, es fácil darse cuenta de ello leyendo las cartas que ella le escribía en las Heroidas. En ellas se ve claramente como Hero es parcialmente culpable por la muerte de Leandro, ya que le presiona para ir a verla todas las noches sabiendo el peligro que corre nadando en las furiosas aguas del mar durante las tormentas típicas del invierno. Leandro como fiel enamorado cumple con los deseos de su amada poniendo en peligro su vida.
Al leer este mito nos hemos dado cuenta del gran parecido que tiene con otra famosa pareja de la literatura: Romeo y Julieta de Shakespeare, que también trata de una pareja de jóvenes enamorados que desobedecen a sus padres por estar juntos. No se parecen solo en esto, sino que también en el trágico final. Cuando Julieta se piensa que Romeo está muerto, mientras que el solo estaba dormido, decide beber del veneno. Al despertar Romeo y ver a su amada muerta se clava una daga provocando su muerte.
Con esto queremos dar a entender que en ambas historias ninguno de los amados quiere vivir sin el otro y decide poner fin a su vida.


2 comentarios:

  1. Estupendo trabajo, chicas. Interesante vuestra reflexión: sacrificado él; egoísta ella. A lo largo del curso volveremos a hablar de amor y de parejas. Ahora que nos estamos adentrando en la Edad Media retomaremos esta reflexión vuestra para hablar del amor cortés; en el Renacimiento y el Barroco estudiaremos a la "belle dame sans merci"...
    Quizá recuerda más la historia de Píramo y Tisbe, que explicaba el otro día Bianca Román.
    El primer vídeo es muy gracioso; el segundo, muy imaginativo.

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  2. Ídem a la opinión de Juan Ramón, el primer vídeo me ha sacado una sonrisa. Me gusta mucho como habéis presentado el fragmento original, creo que nos sitúa bien para entenderlo. Un saludín, nos vemos en clase!

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