Todos los seres humanos –e incluso algún no humano– que han vivido y fenecido en la tierra desde el homo neanderthalensis han resucitado en un mundo que se expande en las riberas de un río aparentemente infinito. Sus cuerpos, desnudos y desprovistos de pelo, son jóvenes. Su alimentación y tecnología básica para la supervivencia está misteriosamente garantizada. En este contexto, el protagonista, Richard Francis Burton, el famoso descubridor y viajero de la Inglaterra victoriana (descubrió el lago Tanganika y pretendía encontrar las fuentes del Nilo) se propone desvelar las causas de la masiva resurrección y el lugar en el que han resucitado: mediante una rudimentaria embarcación pretende alcanzar el nacimiento del Mundo-Río. En su peregrinación fluvial (y metafísica) por el Mundo-Río entra en contacto con grupos humanos de todas las épocas: desde rudas civilizaciones hasta ególatras mandatarios nazis. El ser humano parece no haber aprovechado esta segunda oportunidad para ser más virtuoso: por doquier se suceden las guerras, las colonizaciones, la esclavitud, etc. Pero Burton, a pesar de las continuas adversidades, no abandona su empeño de encontrar respuestas, ya que posee un vago pre-conocimiento del Nuevo Mundo del que carecen los demás.
Como se puede apreciar, es una novela de aventuras en toda regla. De hecho se la ha comparado con Los Viajes de Gulliver de Jonathan Swift, e incluso con El Señor de los anillos de Tolkien. Yo, en cambio, la asociaría con El corazón de las tinieblas de Joseph Conrad, especialmente por su esquema de novela itinerante fluvial o, utilizando un símil cinematográfico, road movie. A pesar de su filiación al género de aventuras, el punto de partida (¡la resurrección o vida más allá de la muerte!) y algunos elementos "futuristas" (algunos humanos vivieron a comienzos del siglo XXI, y la novela fue escrita en 1971, y otras cosas que no desvelo) justifican su filiación con la ciencia ficción. No en vano está considerada una de las obras maestra del género.
La combinación es efectiva: acción garantizada, fácil lectura y, gracias al toque fantástico, originalidad argumental (no se puede negar que el punto de partida es el mayor atractivo para su lectura) y profundidad temática (la reflexión metafísica sobre la vida más allá de la muerte es uno de los temas universales que más ha interesado a la humanidad). Además, las potencialidades argumentales de contar con TODA la humanidad en un mismo lugar son evidentes. Aun así, este recurso no se explota demasiado en la novela. Es cierto que aparecen relevantes personajes de la Historia, pero casi siempre de forma indirecta. Philip José Farmer ha preferido no hacer una parábola sobre la historia universal, sino una novela de aventuras fantástica con un protagonista claro (Richard Burton) y un antagonista con muchos matices: Hermann Goering, un despiadado dirigente nazi.
Otro de los aciertos de la novela es la confrontación de épocas diferentes mediante el diálogo de personajes. El resultado es una interesante relativismo o singularización: resulta muy edificante juzgar una época (en especial la nuestra) desde la óptica de otra. Los anacronismos (especialmente el personaje de Kazz, el neanderthal) son una fuente de comicidad constante.
Entre los defectos quizá se encuentre la corte de personajes secundarios. El ejemplo más claro es el del extraterrestre Monat. Al principio parece que su importancia es capital, pero a medida que avanza la novela observamos que su función pasa de ser insignificante a nula. No he leído el resto de novelas de la saga, así que desconozco si se otorga mayor protagonismo al resto de personajes secundarios en otras novelas posteriores.
En definitiva, nos encontramos ante un texto que no defraudará a nadie, ya que posee una combinación única: entretiene y hace pensar. Yo normalmente me conformo con que un libro cumpla uno de los dos objetivos, así que el disfrute obtenido ha sido doble. Conviene por tanto preguntarse acerca de qué componente pesa más: el entretenimiento aventurero o la especulación filosófico-metafísica. Al comienzo de la novela tiene mayor importancia el segundo aspecto, especialmente en las primeras páginas, pero durante la mayor parte de la novela prima la acción y el entretenimiento. Aun así: no se pueden escindir los dos componentes (el docere et delectare) sino que la obra consigue entretener (el objetivo primordial) haciendo reflexionar. Conviene decirlo sin tapujos: la novela de Farmer es una de las más atractivas reflexiones sobre la vida más allá de la muerte; su especulación metafísica está emparentada con el relato mítico de todas las religiones humanas. En la novela aparecen personajes de diferentes religiones que tienen que preguntarse sobre si el mundo en el que se encuentran coincide con el difundido por los dogmas o los libros sagrados de sus religiones. Es evidente que la novela adopta un punto de vista escéptico respecto a la explicaciones religiosas del mundo, pero paradójicamente persigue el mismo objetivo: dar una explicación a una pregunta que todos nos hacemos: ¿qué pasará cuando muera?
Una crítica mucho más completa en Fantasymundo
JuanRa, parece que hayas hecho marketing!!! Si el libro es igual que lo has pintado, prometo que cuando acabe alguno de los libros que estoy leyendo, lo añado a la mesita de libros de verano :)
ResponderEliminarYo espero contribuir también a esta actividad biblio-estival, pero me parece que tardaré un poquito, porque yo los libros... tardo de uno a dos meses en leerlos, ya que hago con ellos como hace la gente con las series: tengo uno para cada día de la semana, para variar tramas y temáticas. De todas formas, si veo que tardara mucho, al menos presentaría algún libro y hablaría un poco de lo que hubiese leído hasta entonces... Supongo que lo haré del único libro de narrativa que llevo ahora: "Aléxandros: el hijo del sueño" (el inicio de la trilogóa sobre Alejandro Magno de Manfredi).
Bueno, que me enrollo. Cortaré en seco. Xao!!! Y recuerdos para todos!!!
¡Juanra, eres mi salvación! Me encuentro en un profundo abismo en lo que a lecturas se refiere. ¡Incluso el otro día fui al FNAC y no encontré ningún libro que me atrajese especialmente! Pero con este has acertado de pleno. ¡Si es que mira que tenemos cosas en común! El tema de la muerte me preocupa especialmente, y encontrar un nuevo punto de vista me vendrá de perlas. Y, a parte, una excelente novela de aventuras, según tu la pintas. ¡Tengo que hacerme con este libro como sea!
ResponderEliminarAaaaiii juanra!!! que bé! opine el mateix que Javi, pero yo estic llegint-me 'El ultimo Caton' pero no nia manera de acabarmel jajajajaja, si vos pareix bé quan em trobe motivada faré una resenya del clarinetista Jonathan Cohler en el qual vaig fer un curset ací en Xàtiva (encara que parega irreal que un solista aixina estiga ací.. sisisis jajajaja)
ResponderEliminarAvore si em faig amb eixe llibre, i moltes gràcies per esta oportunitat de no perdre el contacte! muaka!